Eclesiastés: Las cosas que no funcionan
Salomón estaba en una posición inusual para emprender las investigaciones reflejadas en este libro porque
Judá e Israel estuvieron en paz durante su reinado de cuarenta años,
él tenía toda la riqueza que necesitaba y, siendo conocido como el hombre más sabio del mundo,
se dedicó a investigar cuál es el significado de la vida.
Introducción a las devociones de febrero
Eclesiastés es uno de los libros favoritos de la Biblia para los escépticos, los que se burlan, los ateos y aquellos que forman parte de ciertas sectas. Ciertos pasajes de este libro dan la impresión de negar que existe la vida después de la muerte. A los ateos les encanta alegar que el libro de Eclesiastés parece confirmar este punto de vista, y es por eso que lo citan con frecuencia. A los hedonistas también les encanta este libro porque aparentemente apoya un estilo de vida un tanto epicúreo. A aquellos que se dedican al placer como el principal objetivo de su vida les encanta el libro porque en todo él se nos exhorta con frecuencia a adoptar la filosofía de “comer, beber y estar alegres, porque mañana moriremos”. Pero además tenemos pasajes en este libro que son los textos favoritos de aquellos que afirman que incluso si sobrevivimos después de esta vida, nos hallaremos en un periodo de sosiego, un tiempo en el que no tendremos conocimiento ni deseo alguno.
Pero ninguno de estos grupos se fija en que es preciso hacer el bien desde el principio mismo, y este libro es un examen de la sabiduría y el conocimiento secular. El libro afirma claramente al principio mismo que se limita a lo que resulta aparente a la mente natural. Una de las frases claves del libro es la repetición continua de las palabras “bajo el sol”. “¿Qué provecho obtiene el hombre de todo el trabajo con que se afana debajo del sol?” (Eclesiastés 1:3). Ésa es la limitación con la que nos encontramos en este libro.
Eclesiastés es un compendio de los descubrimientos acerca de los cuales los humanos son capaces de discernir “bajo el sol”, con lo cual el escritor quiere decir el mundo visible. El libro no toma en consideración la revelación que está por encima de los poderes humanos de observación y de la razón. Es un libro inspirado y exacto, que garantiza que aquello acerca de lo que informa es lo que las personas realmente creen, pero es además un examen de esas creencias. El libro no es sencillamente una colección sobre la antigua filosofía, porque el tema acerca del cual habla es algo realmente actualizado y de enorme importancia. He aquí lo que el lector oirá propuesto por los medios populares, los discursos políticos y los movimientos radicales o conservadores de nuestros días. Esto es lo que escuchará usted en los pasillos de los centros académicos o en las calles de cualquier ciudad. En este libro tenemos en cuenta y examinamos las filosofías de que se valen las gentes para intentar vivir su vida. Es por eso por lo que Eclesiastés es tan práctico y actualizado.