Hechos 1-12: Una historia incompleta

El libro de Hechos es el libro de acción del Nuevo Testamento, y constituye, por tanto, uno de los libros más interesantes de la Biblia. El nombre completo del libro es “Hechos de los apóstoles”, pero no hay muchos apóstoles mencionados en él. Santiago, Juan, Pedro y Pablo son los únicos que aparecen, con ninguna prominencia. A través de los siglos los cristianos han acortado el título y lo llaman simplemente “Hechos”. Me gusta eso mejor, ya que éste es un libro de acción, revelando cómo Dios obra mediante los cristianos.

Hay un conflicto intenso a lo largo del libro, pero un conflicto que es enfrentado con una confianza resonante que es maravilloso de ver. Es una crónica de poder ejercitado en medio de la persecución; un recuento de la vida y salud saliendo de un Cristo vivo a una sociedad enferma mediante mujeres y hombres poco conocidos, muy parecidos a ti y a mí. No podríamos entender el Nuevo Testamento si no tuviéramos el libro de Hechos, ya que llena el intervalo que hay entre los evangelios y el libro de Romanos, que sigue. Al final de los evangelios encontramos a un puñado de judíos reunidos en Jerusalén hablando sobre un reino que ha de venir a Israel. En el libro de Romanos encontramos a un apóstol que ni siquiera es mencionado en los evangelios, y que no era uno de los doce, escribiéndole a un grupo de cristianos en la ciudad capital de Roma, hablando sobre ir a los confines de la tierra. El libro de Hechos nos dice cómo ocurrió esto y por qué ocurrió este cambio.