Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén, y todos, salvo los apóstoles, fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria. Unos hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él. Saulo, por su parte, asolaba la iglesia; entrando casa por casa, arrastraba a hombres y mujeres y los enviaba a la cárcel. Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.
Hechos 8:1-4
Fue por causa de la persecución que surgió sobre Esteban que estos cristianos primitivos fueron presionados a salir de Jerusalén, expulsados a las áreas circundantes, a Judea y Samaria, y comenzaron a predicar la Palabra, de acuerdo con el programa de Dios. Dios utilizó a Saulo de Tarso, incluso antes de que se convirtiera en cristiano, para lograr esto. Dios obra para utilizar los mismos obstáculos puestos en el camino de los cristianos para avanzar Su causa. Te puedes imaginar al joven Saulo, enfurecido por lo que él consideraba una herejía, intentando aniquilarla con todas las energías de su carne, entrando en casa tras casa, arrastrando a hombres y mujeres y encarcelándolos. Ésta es la ira de una conciencia torturada, que intenta, por medio de la actividad ferviente, cubrir la ansiedad, el vacío y el dolor. Sin embargo, Dios utiliza esto como un instrumento para lograr Su propósito.
Dios hace dos cosas con la ira de Saulo: Fuerza a la iglesia a salir de Jerusalén y a Judea y Samaria para cumplir el programa divino que había descrito, y hace que la iglesia primitiva dependa no de los apóstoles sino en los dones del Espíritu distribuidos a todos, ya que estos que fueron dispersados al extranjero no fueron los apóstoles. El Dr. Lucas tiene el cuidado de señalarnos esto. Estos eran cristianos ordinarios y comunes como tú y como yo. Y, sin embargo, tenían dones del Espíritu. Pero nunca habrían descubierto sus dones si no hubieran sido empujados y puestos a trabajar. Así que Dios utiliza esta presión para ponerlos en circunstancias donde comenzaron a desarrollar el don de la evangelización, de testificar, de ayudar, de sabiduría, conocimiento, enseñanza, profecía y todos los demás dones del Espíritu que fueron puestos a su disposición.
A veces pienso que Dios tendrá que hacer esto en nuestros días antes de que la gente comience a creer que tienen dones espirituales y los pongan a funcionar. Quizás tendrá que traer persecución sobre nosotros, para que no haya una dependencia de un ministerio central, sino que cada uno comience a utilizar los dones que Dios le ha dado.
¿Estás pasando por algún tipo de presión hoy? Bueno, pues, quizás no sea un castigo por pecados. La presión, las pruebas y los problemas que se nos vienen encima no son en modo alguno siempre un resultado del pecado en nuestras vidas. A veces lo son, pero quizás sea la forma en la que Dios te presiona para empujarte a una nueva experiencia, a un entendimiento de Su verdad y de las capacidades que te da en tu vida, y para darte una nueva oportunidad para ponerlas en práctica.
Gracias, Señor, por ser totalmente soberano sobre mi vida y por poder confiar en que me utilizarás donde sea que lo creas conveniente.
Aplicación a la vida
Jesús dijo: “En el mundo tendréis aflicción, pero confiad, yo he vencido al mundo” (Juan 16:33). Nuestra confianza no está en las pruebas, sino en Dios, que está obrando, causando que “todas las cosas ayuden a bien” (Romanos 8:28). ¿Descansarás en Dios mientras obre dentro de tus dificultades para hacerte más como Su Hijo?