Así ha dicho Jehová: Actuad conforme al derecho y la justicia, librad al oprimido de mano del opresor y no robéis al extranjero, al huérfano y a la viuda, ni derraméis sangre inocente en este lugar.
Jeremías 22:3
Jeremías está frente al rey Sedequías con un mensaje de que el liderazgo de la nación está terriblemente equivocado. A través de toda la Biblia, los líderes han de ser pastores del pueblo, vigilándolos y cuidándolos. Esto era lo que este rey y otros como él habían fallado en hacer. Los líderes han de ser un ejemplo de rectitud y justicia frente al pueblo. Es una cosa muy seria cuando los oficiales electos hacen cosas que están mal, porque cada líder es, como lo deja claro Pablo en Romanos 13, un ministro de Dios. Puede que no sea un creyente, pero él mismo es un agente de Dios, y ha de representar la norma de rectitud de Dios. Por lo tanto, cuando estos líderes de la tierra son culpables de actos inmorales, el efecto de su delito es mucho mayor que si fueran ciudadanos ordinarios. Jeremías fue mandado a decirle a este rey que esto era lo que estaba mal en su vida. Había fallado en corregir a los líderes de la tierra y en ser un ejemplo de justicia y rectitud.
Otra cosa que han de hacer los líderes de gobierno: “no robéis al extranjero, al huérfano y a la viuda”. Estos son grupos minoritarios en cualquier país, los débiles, los indefensos. El rey es dicho aquí que es su tarea de cuidarse de no hacerles violencia. Aquí hay una conciencia del poder del gobierno para dañar al débil. La burocracia puede crecer, haciendo fácil ignorar y no estar disponible a aquellos que realmente tienen problemas. Cualquier gobierno debe tener una responsibilidad especial de cuidar a los débiles entre ellos.
Finalmente, Jeremías es dado una visión del verdadero pastor. Por primera vez en esta gran profecía, mira a través de los siglos y ve venir a Aquel que cumpliría el ideal de Dios, y más allá al tiempo cuando Él regresará de nuevo para de hecho llevarlo a cabo en la práctica: “Vienen días, dice Jehová, en que levantaré a David renuevo justo, y reinará como Rey, el cual será dichoso y actuará conforme al derecho y la justicia en la tierra. En sus días será salvo Judá, e Israel habitará confiado; y éste será su nombre con el cual lo llamarán: ‘Jehová, justicia nuestra´” (Jeremías 23:5-6). Ése es el nombre aplicado a Jesús por el apóstol Pablo en 1ª de Corintios 1:30: “… Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención”. Él mismo es nuestra justicia. Así que el profeta le ve venir como el justo Rey de Dios, y un día ha de regresar para que Judá sea salvo e Israel viva en seguridad.
Señor de los ejércitos, que mi mente y corazón estén abiertos para entender lo que estás haciendo en las naciones de nuestro día. Ayúdame a inclinarme ante Ti y dejar que Tú escudriñes mi corazón, para que pueda ser una vasija útil para Tu servicio.
Aplicación a la vida
¿A quién son responsables los líderes nacionales finalmente? ¿Qué características esenciales requiere Dios de esos líderes? ¿Quién es el Pastor definitivo y el justo Rey?