Joyous People Breaking Bread Together in Fellowship

Devoción del 12 de agosto

Descubre tus dones

Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para el bien de todos.

1 Corintios 12:7

Muchos cristianos de hoy tienen la idea de que hacer lo que Dios quiere que hagan siempre es deprimente y desagradable; que los cristianos tienen siempre que elegir entre hacer lo que quieren y ser felices, por un lado, o hacer lo que Dios quiere que hagan y ser completamente desgraciados, por el otro. Nada podría estar más lejos de la verdad. El ejercicio de un don espiritual es siempre una experiencia placentera y satisfactoria, aunque a veces la ocasión en la que se ejerza pueda ser infeliz. Jesús decía que era un deleite constante para Él hacer la voluntad de Aquel que le envió. El don del Padre despertaba Su propio deseo, e iba de un lugar a otro haciendo aquello que disfrutaba intensamente.

Un plan factible para descubrir sus dones espirituales comienza por los dones a los que usted se siente atraído. Estudie las listas bíblicas de dones e intente ejercitar aquellos dones que más le atraigan. Observe si los desarrolla y mejora. ¿Se le dan a usted mejor con el tiempo? ¿Ve que sus miedos iniciales decrecen, y desarrolla un creciente sentimiento de competencia? Finalmente, pida a amigos cristianos de confianza que observen su vida y le digan qué dones ven en usted. A menudo, los demás pueden ver nuestras vidas más claramente que nosotros y pueden ayudar a confirmar dones en nosotros que nosotros no podemos ver claramente todavía. De hecho, la observación de otros cristianos nos proporciona una buena comprobación de la realidad de nuestros dones espirituales. Muchos cristianos se preguntan: ¿Tengo un determinado don espiritual, o no?. ¿Reconocen los demás este don en usted? Cuando alguien le dice, sin que usted lo solicite: Nos gustaría que se hiciera cargo de este ministerio; pensamos que tiene un don para esto, entonces puede estar razonablemente seguro de que usted tiene ese don.

Una de las mejores cosas que puede hacer por otro cristiano es ayudarle a descubrir sus dones espirituales. ¡Es mucho mejor que otros confirmen dones auténticos en usted a que usted haga afirmaciones pretenciosas sobre dones que en realidad podría no tener! Un gran maestro de Biblia solía decir: Es tan penoso ver a alguien que piensa que tiene el don de la predicación, ¡y que nadie en su congregación tenga el don de escuchar!.

Los dones necesitan ser ejercitados igual que los talentos. La práctica tiende a la perfección. Conforme la maestría en el ejercicio de un don se desarrolla, la bendición espiritual que trae se volverá más y más evidente. Se encontrará a sí mismo buscando más y más ocasiones en las que usar su don. Pero recuerde: Ese don no se le dio a usted para su progreso personal, sino como medio de enriquecer espiritualmente a otros. Como Pablo nos recuerda: Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para el bien de todos (1 Corintios 12:7).

Casi nadie descubre todos sus dones al principio de su experiencia cristiana. Los dones, como los talentos, pueden permanecer sin ser descubiertos durante años y luego emergen cuando una cierta combinación de necesidades o circunstancias los saca a la luz. Es sabio estar siempre listo para intentar algo nuevo. ¡Quién sabe si lo que el Espíritu de Dios le ha puesto a las puertas para un nuevo esfuerzo es con el propósito expreso de ayudarle a descubrir dones que nunca supo que tenía!

Padre, abre mi sensibilidad a formas inexploradas de ejercitar los dones que me has dado. Úsame para Tu gloria.

Aplicación a la vida

¿Han mencionado otros cristianos un don espiritual que yo no noté que tenía? ¿Qué puedo hacer para desarrollar o ejercitar este don?

Esta devoción diaria fue inspirada por un mensaje de Ray

Ch 5: Discovering and Using Your Gift

Lea el mensaje de Ray